A medida que aumenta la experiencia al volante también aparecen diferentes hábitos que por desgracia no siempre son buenos. Es más: cuanto más experimentado es el conductor, más difícil es deshacerse de ellos.
1. Apoyar la mano en la palanca de cambios
Muchas personas tienen la costumbre de poner la mano en la palanca de cambios, como si fuera un posabrazos. No vale la pena hacerlo, al menos porque hay que sostener el volante con las dos manos. Debido a esta pequeña pero constante carga, en la caja de cambios los engranajes rozan los sincronizadores, lo que afecta al cambio de velocidades.
2. Echar gasolina sólo cuando el tanque está casi vacío
Cuando el auto está sin uso, en el depósito de combustible se acumulan impurezas mecánicas y aparece un poso en el fondo. Esta suciedad llega a la bomba inyectora, causando daños a la misma y a los filtros. En invierno es necesario dejar al menos medio tanque de combustible para evitar la formación de grandes cantidades de condensado. El agua en el tanque en invierno puede causar su deformación y originar otros problemas.
3. Frenar con frecuencia
Mantener la distancia y conducir acorde a la velocidad del resto de vehículos es lo que se enseña en las autoescuelas. Pero si frenas con frecuencia y sin necesidad, prepárate para la sustitución periódica de las pastillas de freno y los discos. Para evitar una situación desagradable en la carretera, se deben reemplazar a tiempo los tubos de freno y controlar el nivel de líquido en los frenos.
4. No prestar atención a los ruidos extraños
Un leve chirrido o ruidos inusuales pueden ser una señal de algún tipo de mal funcionamiento. Muchas personas ignoran estas señales y, como resultado, al auto acaba pasándole algo desagradable en el momento más inoportuno. Si el auto hace ruidos inusuales, es necesario hacer un diagnóstico para resolver el problema.
5. No utilizar el freno de mano
Si dejas un auto con caja de cambios automática en una cuesta, toda la carga recae sobre el engranaje del eje de salida de la caja de cambios. Para estacionar con éxito en una pendiente, mantén presionado el pedal del freno, mueve la palanca al modo de aparcamiento, sube el freno de mano y, sólo después, suelta lentamente el pedal del freno.
6. Conseguir altas revoluciones con el motor frío
La mayoría de los motores modernos no necesitan calentarse. Pero vale la pena recordar que hasta que la aguja no llegue a la temperatura de funcionamiento, no se debe poner el motor a más de 2 mil revoluciones. En temperaturas bajo cero se puede esperar 1-2 minutos después de haber arrancado el auto y luego empezar a moverse.
7. Mantener pisado el freno cuesta abajo
Muchos mantienen el pie en el pedal de freno durante un descenso para estar preparado y frenar en cualquier momento. Esto provoca un sobrecalentamiento en el sistema de frenado y desgasta las pastillas y discos de freno. En vez de esto, hay que cambiar a una marcha más baja para conseguir el freno de motor.
8. ¿Por qué hay que dar la vuelta alrededor del auto antes de cerrarlo?
El nuevo truco de los ladrones consiste en abrir el auto con ayuda de una moneda. Ellos insertan una moneda en el tirador de la puerta del lado del copiloto, ya que los conductores rara vez prestan atención a ella cuando están solos. Más tarde, cuando cierras el auto, el mando hace su función pero la cerradura central no se bloqueará y el auto permanecerá abierto. Ten cuidado y sé cauteloso.
Bonus: 12 Cosas que pueden salvarte la vida en una situación crítica
En una situación extrema incluso los objetos más comunes valen oro. Es importante saber cómo comportarse y usar las cosas que tienes a la mano para protegerte y salvarte la vida.
#12. Para prender una fogata rápido, coloca ramas o carbón en una huevera
El cartón se prenderá rápidamente y la temperatura estará lo suficientemente alta para poder encender el carbón o las ramas húmedas incluso si corre mucho aire.
#11. Filtro para agua con una camiseta
Coloca el contenedor con el agua sucia a un nivel más alto que el contenedor vacío. Corta un pedazo de tu camiseta y sumerge un extremo suyo en el agua sucia y el otro en un recipiente vacío. Para poder beber el líquido con toda la confianza, hiérvelo.
#10. Prende un crayón de cera
Un crayón de cera se puede usar como vela o para prender fuego. Está hecho de materiales inflamables. Un crayón de estos puede permanecer encendido durante 30 minutos.
#9. Para calentarte, coloca hojas y hierba debajo de tu ropa
Las hojas mantienen el calor y te protegerán de la hipotermia en una situación crítica.
#8. Los mosquito y otros insectos odian el aroma de las hierbas encendidas
Para protegerte de los piquetes de insectos, echa en la fogata una ramita de tomillo o menta. El aroma también ahuyenta a los animales salvajes.
#7. Usa la pasta dental para deshacerte de la comezón por piquetes de insectos
La pasta dental contiene componentes antiinflamatorios que reducen la hinchazón y el enrojecimiento. Mientras que el mentol ayuda a refrescar el área del piquete y reducir la comezón.
#6. Si te rasguñaste la piel, aplica en el área afectada un bálsamo labial
El bálsamo labial ayuda a evitar que en la herida entren bacterias. También puedes aplicarlo sobre tu rostro como protección de las temperaturas bajas y deshidratación.
#5. Usa un tampón para detener el sangrado de una lesión
Los tampones son estériles, por lo que podrán absorber la sangre y detener incluso el sangrado más fuerte.
#4. Un condón es un lugar excelente para almacenar agua potable
Los condones son resistentes y estériles, así que en una situación de emergencia puedes usarlo para almacenar agua potable. Ata a la boca un tubito pequeño, llénalo de agua y colócalo en un calcetín. Obtendrás un odre casero que podrá almacenar hasta 1 litro de agua.
#3. Rasca una púa de guitarra con un cuchillo para prender la fogata rápidamente
Las púas para guitarra están hechas de un material que se llama celuloide. Se incendia muy rápido y quema bien incluso si el día es húmedo.
#2. Para elaborar una brújula, coloca una hoja en el agua y una aguja encima de él
Si te perdiste, puedes hacer una brújula muy sencilla. Toma una aguja o un alfiler y frota un extremo suyo con una tela gruesa (por ejemplo, pantalón de mezclilla). Coloca la aguja en el agua sobre una hoja de árbol. El extremo cargado de la aguja apuntará hacia el norte.
#1. Cómo distinguir una serpiente venenosa de una inofensiva
Si te mordió una serpiente, no entres en pánico, tal vez no fue venenosa.
- En caso de una mordida de una serpiente venenosa, quedarán marcas claras y grandes de sus colmillos delanteros. Una serpiente no venenosa, por lo general, tiene colmillos pequeños ubicados en 2 filas.
- Las pupilas de una serpiente venenosa se parecen a las de un gato. Las serpientes inofensivas tienen pupilas redondas.
- Las escamas de una serpiente venenosa en la parte adbominal son enteras, mientras que de una serpiente inofensiva están partidas.